Psicoterapia
Comenzar una psicoterapia significa comenzar a priorizarte y a cuidarteA veces, tomar la decisión de iniciar una psicoterapia no es fácil, nos cuesta darnos la prioridad y el cuidado que necesitamos. Es normal sentir que en determinados momentos no te encuentras bien emocionalmente o que estás atravesando una etapa difícil de gestionar o simplemente no sabemos qué nos pasa ni por qué. Es en esos momentos donde la psicoterapia puede ayudarte no sólo a salir de una crisis, sino utilizar la crisis para tener un mayor crecimiento personal.
En muchas ocasiones, nuestro propio cuidado queda en un segundo plano, comenzar una psicoterapia significa comenzar a priorizarte y a cuidarte, aportándote un momento y espacio para ti en el que aprender a escucharte y conocer tu necesidades.
La terapia es, ante todo, un espacio seguro, donde ponerle voz a los problemas que te generan malestar, comprenderlos mejor para poder abordarlos con confianza. Es como construir un mapa de tu propia vida, que te ayude a comprender cómo has llegado al punto en el que estás, y vislumbrar la salida hacia donde quieres dirigirte.
A través de un acompañamiento terapéutico empático juntos analizaremos determinados aspectos de tu personalidad, tendencias, evitaciones o situaciones de tu pasado que han podido afectar en tu manera de comportarte o sentirte.
El objetivo de cada proceso psicoterapéutico es que puedas afrontar tus problemas vitales y los conflictos en las relaciones con un mayor conocimiento que te permita tomar las decisiones que más alineadas estén con lo que realmente quieres y deseas. Que puedas responder con más seguridad a las situaciones difíciles que afrontas y puedas tomar el control de tu vida.
Terapia Psicológica
Empezar un nuevo caminoSi has decidido empezar a darte prioridad y a mejorar tu bienestar emocional estás en el lugar correcto. A lo largo de la vida se nos van planteando dificultades a las que vamos haciendo frente utilizando los recursos que tenemos, apoyándonos en familiares y en amigos.
Tomamos decisiones sin ser conscientes buscando adaptarnos de la mejor manera a las circunstancias que nos vamos encontrando. Sin embargo, hay momentos donde sentimos que hemos perdido el rumbo, perdemos la confianza y experimentamos sentimientos de malestar, de apatía, ansiedad, tristeza o enfado.
Es en esos momentos donde la psicoterapia puede ayudarte a conectar de nuevo con todas tus potencialidades. Comprender el momento en el que perdiste el rumbo y volver a caminar hacia la dirección que deseas. Comenzar una psicoterapia significa comenzar a priorizarte y a cuidarte, aportándote un momento y espacio para ti en el que aprender a escucharte y conocer tu necesidades.
La psicoterapia es un proceso por el que se desarrollan cambios progresivos en tu bienestar emocional. Este proceso lo podemos dividir en tres etapas:
En la primera etapa, exploramos tu situación vital, especialmente el malestar emocional, así como tus circunstancias vitales pasadas y actuales, tus expectativas y anhelos, los problemas y dificultades con los que estés lidiando actualmente, así como los apoyos y circunstancias positivas que tienes actualmente en tu vida.
En una segunda etapa, empezamos a encajar las diferentes piezas del puzle. Poco a poco vamos a integrando la conexión profunda entre tus emociones, tus experiencias, tus circunstancias vitales, y tus deseos y necesidades. Esta es una etapa de autocomprensión y autoconocimiento. Las emociones deben pasar de ser juzgadas como el aspecto negativo, como el obstáculo, a ser comprendidas como los sistemas de alarma y defensa que te protegen.
En una tercera etapa, podrás usar toda esta información para poder tomar decisiones y hacer los cambios vitales deseados. Desarrollar tus fortalezas para enfrentarte a los problemas en vez de evitarlos. Tomar decisiones sobre las nuevas direcciones vitales que quieres tomar. Alejarte o quitar de tu vida aquello que te daña o que ya no deseas más.
Todo este proceso de exploración, autoconocimiento y cambio, te llevará a desarrollar una mayor confianza en tus decisiones y tu visión del mundo. Desarrollando así una mejor autoestima. Tus emociones no serán tan intensas, y cuando aparezcan, tardarán menos tiempo en ser reguladas, al haber una mayor integración entre tu vida y tus deseos y necesidades.